Sitiocooperativo:- ¿Cuál es tu visión de la actual situación social de Argentina?
León Gieco:- Me parece que hubo algo que se cortó, que fue la era del menemismo. Una era nefasta para la Argentina, una era entreguista, una era muy similar a la de Martinez de Hoz, cuando se hacía propaganda a los productos de afuera destrozando absolutamente la industria nacional. Fue una era de mucha corrupción donde se tomaron el país por su cuenta; así como los militares se tomaban la vida y la muerte de la gente, muchos que formaron parte del gobierno menemista se tomaron el dinero que le pertenecía a la gente. Además, durante esa década se creó una impotencia muy grande porque la gente veía en la televisión y en las revistas la corrupción del gobierno, pero como este tenía un acuerdo para que la justicia no actúe, a la gente no le quedaba otra cosa que bajar la cabeza e ir a trabajar. Bueno, esa era ahora se cortó, y eso es muy importante.
Ahora estamos frente a una nueva era, este gobierno aún es muy joven como para decir si están haciendo las cosas bien o no. Yo creo que la actitud del presidente es muy positiva, la abolición de las leyes de obediencia debida es muy importante. A partir de ahora les podremos hacer juicio, quizás podamos cerrar viejas heridas, pero aún nos queda un problema muy importante que es la parte económica. Nosotros venimos pidiendo prestamos desde la época de Rivadavia... a partir de 1976 los militares pidieron 40 mil millones de dólares de préstamo para poder llevar adelante su plan genocida y para hacer 3 o 4 autopistas, después vino Alfonsín que pidió alrededor de 50 mil millones de dólares, y después llegó Menem y pidió 70 mil millones de dólares para poner el dólar uno a uno con la plata prestada; ahora vos, yo y todos estamos viviendo en un país que debe 140 mil millones de dólares.
-¿La economía solidaria y cooperativa podría formar parte de un nuevo sistema económico en Argentina?
-Claro... eso se está armando. Hacía mucho tiempo que Argentina no exportaba, ahora empezó a exportar... se creó un nuevo modismo que son las fábricas recuperadas por sus obreros... creo que son todos arranques positivos, pero tampoco le podemos pedir peras al olmo ni pedir que este gobierno solucione todo rápidamente porque es como tratar de pasar un paredón que es muy alto. Pero esto la gente lo puede entender, el problema son los otros políticos que van poniendo piedras en el camino.
-¿Crees que la gente ha asumido una actitud solidaria con la lucha hacia la justicia social?
-Nadie conoce la tragedia hasta que no golpea la puerta. Eso es parte de una canción mía, y yo creo que el argentino es así. El argentino es solidario pero no le gusta luchar; no lucha por el vecino, le cuesta muchísimo eso. Yo creo que no hay que esperar que nos pasen las cosas, hay que luchar por el que necesita, porque cuando necesitamos ese que ayudamos nos viene a ayudar a nosotros. El argentino es solidario con criterio de dar, vos le pedís para las inundaciones y busca algo para dar. Pero yo hablo de solidaridad como materia educativa, debería haber una materia en los colegios que se llame solidaridad, donde los chicos aprendan a trabajar con el vecino, y si al vecino lo vienen a buscar, no decir: por algo debe ser; sino enfrentar a la policía y preguntar: ¿por qué lo vienen a buscar a mi vecino?.
-¿Hay una actitud y un compromiso social en tu música?
-Si, no solamente la música, sino la actitud física. Yo voy a tocar para recaudar plata para lugares carenciados, para comedores infantiles, para colegios... a veces actuamos parecido a los bandidos rurales porque vamos a buscar plata a un lugar y lo llevamos a otro. Tengo una imagen con Rally Barrionuevo de cuando salimos de tocar en Santiago del Estero con un gran fajo de plata y lo llevábamos en la gaveta del auto por un camino de tierra para entregárselos a los del Mocase. Ahora vamos a hacer una convención de Mapuches, a quienes siempre están sacándoles los terrenos, contagiándoles el agua... también vamos a hacer algo por la gente de Esquél, donde una empresa canadiense pretende sacar oro y el arsénico que utilicen va a caer en el lago de donde se toma el agua de Esquél. Nosotros estamos siempre alertas a todo ese tipo de cosas y trabajamos con todas las entidades, nuestro trabajo es ir a los lugares y cantar, ya sea para recaudar o para plantear nuestra ideología.
