La portabilidad numérica en Argentina otorga al usuario la posibilidad de mantener su número de teléfono, sea de línea fija o celular, a pesar de cambiar de empresa prestadora.
Si bien el proyecto fue fijado por un decreto del ex presidente De la Rúa, todavía no está en funcionamiento.
EL actual Gobierno había fijado para finales de este año su implementación pero finalmente retrasó el plazo hasta mediados de 2012.
Los motivos de la demora en la implementación se deben a algunas modificaciones en el cronograma elaborado entre la Secretaría de Comunicaciones y la de Comercio Interior. Inicialmente, los pasos previos debían estar terminados para mayo pasado, con la fase de planificación y diseño finalizada, junto a las especificaciones técnicas y operativas.
En octubre se debía informar a los usuarios y en diciembre ya tendría que estar disponible la portabilidad. Pero no se cumplió con ninguno de estos vencimientos y el Gobierno tuvo que reorganizar las fechas.
En una resolución publicada en el Boletín Oficial, se notificaron los pliegos de licitación y el nuevo cronograma, en el cual se estima para septiembre la adjudicación del ABD, y recién para marzo o junio de 2012 el total establecimiento del proyecto.
