El negocio del petróleo en la Argentina

... El negocio del petróleo en el país, producto de una estructura creada a inicios de los '90 que llevó a que se desmantelara el engrosado y poco eficiente aparato de la antigua Yacimientos Petrolíferos Fiscales, y a partir de la cual, según se dijo, se dejaría de pagar el precio de la ineficiencia, es manejado por un grupo reducido de empresas que, en virtud de las concesiones que se les hicieron, operan con poder omnímodo sobre el mercado de los combustibles.

Atado el país a cláusulas absurdas, como la de contemplar para cualquier ajuste los precios internacionales del petróleo, y enfrentado el mundo ahora a la perspectiva de que los Estados Unidos ataquen a Irak, esos precios se han disparado a las nubes, y con ellos se pretende hacer seguir a los que se abonan en la plaza local, que nunca vio bajar tarifas si bajaba la cotización mundial.

Como el país no tiene poder, solamente puede obrar sobre esos precios estableciendo retenciones a los precios del crudo que se exporta al exterior, que ahora establecen una jugosa diferencia a favor de las petroleras, que pagan insumos, sueldos, impuestos y servicios a precios internos bastante devaluados pero pretenden mantener las escalas internacionales en su propio beneficio.

Claro, les conviene aumentar los precios de los combustibles, ya que de esa forma deprimen la demanda y crean excedentes para exportación, que les deben dejar mayor ganancia que el negocio local. Y llevan a que el gobierno de la Nación se convierta en su asociado, ya que a mayores precios mayor es la participación del Estado, no así de las provincias que siguen, como Mendoza, sufriendo las consecuencia de políticas centralistas que ignoran el precepto constitucional del dominio original de los recursos. 

Diario Los Andes, Mendoza, Argentina, Miércoles 26 de febrero de 2003