Perpetua y cárcel común para el represor

Las vueltas del calendario hicieron que fuera un 24, aunque de julio, el día que la denominada causa Brandalisis, centrada en el secuestro, tortura y asesinato de Hilda Flora Palacios, Humberto Brandalisis, Carlos Lajas y Raúl Cardozo a fines de 1977, llegara a su fin.

Seguramente las palabras finales del presidente del Tribunal, Jaime Díaz Gavier: “El juicio ha terminado” se imprimirán en las páginas que recuerden este día como el fin del principio. Como así también la condena que puso tras las rejas y revoco la prisión domiciliaria de los 8 imputados.

En la tarde del jueves, y en vísperas de la lectura del fallo del Tribunal Federal Nº 11, los medios de comunicación reflejaron el hecho de carácter histórico.

El arduo y paciente trabajo de los organismos de Derechos Humanos de Córdoba, timoneado por los abogados Claudio Oroz y Martín Fresneda, sentaron en el banquillo de los acusados al más perverso de los represores cordobeses, junto a sus secuaces. Una oportunidad que sus víctimas no tuvieron.

Menéndez, de 81 años, era llamado “Cachorro” cuando decidía quién vivía y quien moría de los secuestrados. El jefe del Tercer Cuerpo del Ejército con asiento en la capital cordobesa, fue reconocido como uno de los represores más crueles de la dictadura. Su influencia, además de Córdoba, llegaba a otras provincias como Jujuy, Salta, Catamarca, La Rioja, San Juan, Mendoza, San Luis, Santiago del Estero y Tucumán.

Luego de dos intensos meses, donde se oyeron los más aberrantes y estremecedores relatos de los testigos y víctimas del horror, vino el final esperado largamente por 32 años.

“Los errores (de la dictadura) somos nosotros, los vivos... se equivocaron, tendrían que habernos matado”, les dijo en la cara a los acusados el italiano Piero Di Monte, testigo del juicio.

“La prueba es contundente”, manifestó el Dr. Claudio Oroz antes de conocer el fallo. “Es importantísimo el aporte que han hecho los testigos, que son los verdaderos ojos, oídos y voz de los que ya no están. Pero también es muy importante la documental que se consiguió rescatar. Y ahora estamos acá. Con muchos nervios. Es imposible no emocionarse, pero también hay que mantener la coherencia para entender que no se trata de venganza sino pura y exclusivamente de que las instituciones funcionen”.

Las penas otorgadas por los jueces Jaime Díaz Gavier (presidente del tribunal), Carlos Otero Álvarez y Vicente Muscará se corresponden a con el pedido de la fiscalía, a cargo de Maximiliano Hairabedian, y también incluyeron la inhabilitación perpetua como funcionarios públicos.

Hecha pública la lectura de la sentencia, Oroz opinó que las últimas palabras de Menéndez no hicieron más que confirmar que “seguían pensando igual que hace 30 años atrás; que seguían siendo tan asesinos como hace 30 años atrás; que es necesario aplicarles tratamiento penitenciario porque no pueden tener una mentalidad tan perversa. Estoy feliz”, concluyó.

Las sentencias

Luciano Benjamín Menéndez, Ex jefe del Tercer Cuerpo de Ejército