El gremio, a través de un comunicado emitido por el secretario general, Julio Acosta, y el secretario adjunto, Oscar Constantino, salió a diferenciarse claramente de Luz y Fuerza-Mercedes.
Los dirigentes expresaron que el artículo 12, inciso f), del Convenio Colectivo de Trabajo, que los camaristas civiles Graciela Cristina Martín y José Nicolás Galeano ordenaron pagar _lo que elevaría a 7.000 pesos los sueldos_, "no se aplica en ninguna empresa eléctrica del país, sea cooperativa, estatal, privada o del sindicalismo empresarial".
El texto rubricado por Acosta y Constantino indica que "el Sindicato Luz y Fuerza-La Pampa aclara que ante una decisión de la justicia que favorece a los trabajadores, pero pone en peligro a la Cooperativa Popular de Electricidad, los afiliados a nuestro sindicato no vamos a cobrar lo dictaminado por la justicia".
"En primer lugar -añade- porque el fallo, si bien se ajusta a derecho, no se aplica en ninguna empresa eléctrica del país, sea cooperativa, estatal, privada o del sindicalismo empresarial. En segundo lugar porque nunca se aplicó este inciso en ninguna escala salarial homologada en el Ministerio de Trabajo para ningún trabajador, ya que introduce una descomposición de la escala salarial, pues los únicos favorecidos serán una minoría de categorías altas ya que empieza a aplicarse desde la categoría 13 en adelante".
"En tercer lugar ,agrega la nota, porque esta distorsión salarial pondrá en riesgo la fuente laboral y una empresa que es de propiedad social. Y en cuarto lugar porque esta situación ya ha sido advertida a los compañeros del Sindicato Luz y Fuerza-Mercedes, comunicándoles que no estábamos de acuerdo con el reclamo. Para explicar esto habíamos realizado una asamblea de (el sector) Redes y reuniones en otros sectores".
"SOMOS CONSCIENTES"
Más adelante, los lucifuercistas de La Pampa, que agrupan a 120 empleados de la CPE, manifestaron que "somos conscientes que esta decisión de hacer pública nuestra opinión, implica costos gremiales para nuestra organización. Lo hacemos desde una posición política que siempre defendió a la cooperativa y al movimiento cooperativo. Hemos sido la única organización sindical que enfrentó las privatizaciones en La Pampa, especialmente en la última década cuando, en perjuicio de las cooperativas, se intentó instalar una turbina o la desregulación eléctrica para incorporar en el mercado eléctrico provincial la actuación de las multinacionales".
"Párrafo aparte merece la actitud del Sindicato Mercedes y la FATLyF (Federación Argentina de Trabajadores de Luz y Fuerza) que, como nosotros, conoce esta situación, pero con oportunismo, irresponsabilidad y conveniencia reclama lo que nunca le reclamó a las privatizadas y menos aún paga a los trabajadores que tienen en las empresas del holding empresario que manejan", acotaron Acosta y Constantino.
Aseveraron que "distinguimos claramente las cooperativas de los consejos de administración. Estos últimos deben comprender que no deben elegir como enemigos a los trabajadores. Que los enemigos son las multinacionales y las privatizadas. Que deben recuperar la herramienta de diálogo; especialmente con los sectores comprometidos con la lucha por otro tipo de sociedad".
"Defendimos y defendemos responsablemente nuestros derechos y salarios _añadieron_. En quince años hemos tenido 23 cesantes, todos reincorporados, por luchar en defensa de la cooperativa en 1989 y de nuestros derechos en 1998. Somos una construcción sindical de nuevo tipo, alternativo, que surge como una respuesta de los trabajadores al modelo neoliberal. Y un obstáculo fundamental para el neoliberalismo es el movimiento cooperativo. Por eso nuestro compromiso con esta organización social y con la solidaridad, y la lucha por los derechos de los trabajadores".
Fuente: La arena.
