“Decir que de algún lado la plata sale” para que la Cooperativa Regional de Electricidad, Obras y otros Servicios de General Pico (Corpico) ofrezca nuevos servicios, y que por lo tanto está en condiciones de afrontar el reajuste, es “un planteo simplista”, dijo Lange en directa respuesta a una expresión reciente del dirigente lucifuercista Néstor Fortete.
Tras el acuerdo logrado entre las cooperativas nucleadas en la Federación Pampeana de Cooperativas (Fepamco) y el gremio de Luz y Fuerza para otorgar a los trabajadores un aumento salarial de 15 por ciento, el presidente de Corpico consideró que los aumentos inciden de manera diferente en las numerosas cooperativas de La Pampa pero en todas la situación es difícil de afrontar.
“Hay que hacer una distinción entre las cooperativas grandes, las medianas y las chicas porque esa realidad existe y la ecuación económica es diferente para cada una de ellas. Todo lo que corresponde a las cuestiones salariales se maneja a través de Fepamco-Fatlyf y cuando se hacen arreglos salariales es para todas del mismo modo y es ahí cuando aparece la inequidad en el sentido de que las grandes, como la Cooperativa Popular de Electricidad, Obras y Servicios Públicos de Santa Rosa Limitada (CPE) y Corpiño tenemos márgenes diferentes para afrontar los salarios”, analizó Lange.
Hizo la salvedad de que “hay algunas cooperativas con particularidades porque tienen dos o tres grandes usuarios que les consumen una gran cantidad de energía y generan un fuerte ingreso sin demasiada demanda de atención”.
Otro elemento de distorsión en la consideración de las finanzas de cada entidad solidaria es la existencia de “muchos kilómetros de líneas rurales porque se trata de un servicio que es caro en términos económicos, ya que hay medidores a 50 kilómetros de distancia de Pico, por ejemplo, con lo que ello implica para la atención de ese usuario”, añadió el dirigente.
Ajustados
Hay un punto, más allá de las diferencias comentadas, en el que “todas las cooperativas estamos iguales” dijo Lange. “Siempre que conseguimos algún cambio a nivel de tarifas es para compensar los desajustes que se fueron produciendo en los insumos o en la mano de obra. Los aumentos que pueden aplicar las cooperativas siempre van por detrás de los costos”, reprochó el presidente de Coprico.