La situación del agua para consumo humano es un problema en muchas regiones de Córdoba y en lugares como Calos Paz, cargada de turistas, el panorama no es el mejor.
Si antes del fin de semana no aparecen las precipitaciones, la Coopi – prestataria del servicio – deberá realizar cortes parciales. “Como hemos cambiado la mayoría de las cañerías de Carlos Paz tenemos una manejabilidad que nos permite hacer microcortes que no se sienten y los hacemos en forma rotativa”, explicó Alejandro Eguiguren a Sitiocooperativo.
Pero el gerente de la cooperativa sostiene que la crisis hídrica en toda la región semiárida de la provincia de Córdoba es un tema que el “gobierno y los sectores inmobiliarios” deciden ocultar para no afectar el flujo económico. “Creemos que es un error porque cuando pasa el verano, no se hacen las obras y no se toma conciencia”, afirma Eguiguren.
Carlos Paz toma el agua del río San Antonio que en los últimos 10 años redujo su caudal a causa del deterioro ambiental y del aumento poblacional. Desde la Coopi instan a que se hagan las obras necesarias para sostener condiciones óptimas de provisión ya que no es un tema únicamente de uso racional del agua sino de mayor número poblacional. “Aumenta la demanda y disminuye la oferta”, concluyen desde la Coopi.
Sin contrato. En tanto, la Cooperativa Integral de Carlos Paz inició un nuevo año sin un contrato de concesión con la municipalidad. Esta situación impide la aprobación de un plan de obras que permita, entre otras cosas, soportar la crisis hídrica. “Desde la década del 70 estamos sin aprobación de obras, de los tanques que ayudarían a soportar crisis", sostiene Eguiguren. También agrega que el gobierno provincial debería impulsar definitivamente la instalación de medidores de agua domiciliarios en Córdoba capital donde se asienta el 50% de la población de Córdoba y donde mayor cantidad de agua se derrocha.
