Alberto sabe de lo que habla. Investigar es una de sus pasiones y es algo que viene haciendo desde hace años. Fue comerciante, docente en el colegio secundario, intendente y hoy se dedica a dos de sus actividades preferidas: la música y la historia. Este último aspecto es el que lo tiene al trote por estos meses, a raíz de un trabajo realizado hace años en el que documenta el paso de José de San Martín por su ciudad.

Una conferencia lo trajo por Córdoba capital, donde nos reunimos a tomar un café y compartir una amena charla, en la que explicó que desde este año, el 9 de octubre no será un día más en La Carlota. “Ya que se conmemorará la histórica visita del Libertador, allá por 1819”.

Y ahí, con pasta de docente, nos ubica en tiempo y espacio: “San Martín había terminado su campaña en Chile y estaba preparando el Ejército de los Andes para ir al Perú. Y el gobierno del directorio, con José Rondeau a la cabeza, le pide que vaya a Buenos Aires con 1000 hombres, que ponga su espada y su prestigio para defender al directorio frente a los caudillos provinciales”.

Ante la insistencia de Rondeau “Se pone en marcha desde Mendoza con una escolta de 3 o 4 personas, hace una escala en San Juan y la mañana del 9 de octubre llega a La Carlota donde se encontraba la Comandancia General de la Frontera del Sur”.

Y es en este lugar donde San Martín se entera por informes de sus enviados que los caminos a Buenos Aires estaban impedidos y que si llegaba, no podría excusarse de tomar partido por uno u otro bando. Entonces decide volver a Mendoza para seguir con su plan de organizar el ejército y llegar al Perú con sus planes independentistas. “Esto se llama La decisión de La Carlota, lo que hace que rompa con el gobierno de Buenos Aires”, manifiesta Alberto, y agrega: “San Martín siempre dijo `Mi sable jamás saldrá de la vaina por opiniones políticas´ y con este hecho lo puso en práctica”.

El historiador agrega que esta visita tuvo gran trascendencia en la vida militar de San Martín y en la historia latinoamericana, “lo que pasa es que nunca se puso en valor, nunca se sacó a la luz”.

En La Carlota hay una réplica del fuerte al que llegó San Martín, que hoy es un museo histórico. Este edificio, que hoy es un testimonio de la historia, fue diseñado por el ingeniero que proyectó el frente de la Catedral de Córdoba. Se encuentra en el parque de la costanera, al ingreso de la ciudad.

Tierra de tradiciones

Alberto tiene 76 años y asegura que cuando era chico, su pueblo albergaba cerca de 6.000 almas y tenía las características de las pequeñas localidades: calles de tierra, pocos autos y la bicicleta como medio de transporte por excelencia. “Asimismo, como cabecera del departamento Juárez Celman, siempre tuvo mucha actividad. Hoy la base de la economía está vinculada con el sector de agro, hay dependencias públicas y algunas pymes. Además, hay que tener en cuenta que se encuentra enclavada en la intersección de dos rutas, lo que le da una dinámica particular”.

Sobre los principales festejos y acontecimientos de la ciudad, que hoy tiene alrededor de 15.000 habitantes, asegura que “tenemos un calendario interesante, dentro del que se encuentra la semana de La Carlota para recordar el 12 de abril, la fiesta de la tradición, que se realiza en noviembre con más de 1000 jinetes, la fiesta patronal del 24 de septiembre en honor a Nuestra Señora de la Merced, la Expo Granja organizada por la Escuela Especial Julián Carballo y a esto se le suma desde este año el festejo del 9 de octubre para recordar el paso de San Martín”.

Por sus actividades, Alberto tuvo contacto con gran parte de quienes habitan la ciudad y confiesa con orgullo que todavía conserva amigos de la infancia. Fue profesor del colegio secundario por 30 años, intendente por dos períodos y participó en actividades vinculadas a la música. Tiene varios libros publicados en base a sus investigaciones. “Uno estudia y escribe para compartir”, asegura. “Ahora estoy trabajando en una crónica general del pueblo, ya casi estoy terminando el primer siglo de vida, espero que el año que viene pueda llevarla a la imprenta”.

Estudió música en La Carlota, y fue director de coro. “Todos los días de mi vida sea cual sea la hora a la que llegue a mi casa, toco el piano. Es mi cable a tierra”.

Alberto finaliza con una reflexión sobre su querido pago: “Mucha gente vive como una falencia el hecho de que nuestro pueblo, habiendo sido tan importante en otras épocas, hoy sea una pequeña ciudad y no se haya desarrollado mucho más. Pero La Carlota es una de las poblaciones más antiguas de la provincia, con tradiciones arraigadas y una fuerte personalidad. Un pueblo en el que vale la pena vivir”.

Paola Perticarari

Ciudad sanmartiniana

Este año, la Municipalidad de La Carlota decidió poner en el calendario de celebraciones del año el 9 de octubre, para conmemorar el paso de San Martín por la ciudad. Se realizaron dos esculturas, una en el borde del río, en el vado, por donde entró san Martín esa mañana y otra frente al lugar donde se encontraban los portales del fuerte. El recorrido entre ellas, que es el que realizó el libertador, se encuentra también señalizado. Estuvo en esta ciudad sólo un día. Llegó el 9, mantuvo varias reuniones, descansó y emprendió el regreso el día 10 con el alba. En ese momento tenía 41 años.

En honor al Rey Carlos

Como muchas otras, esta localidad no tiene fecha de fundación y ya desde 1690 hay registros de estancias en la zona. Alberto asegura que “La Carlota se formó alrededor de la guardia militar, en 1752 se construyó el fuerte y llegaron a este lugar 40 soldados. Pero la fecha que se toma como referencia es el 12 de abril 1797, cuando una cedula real transforma al `Pueblo del Sauce´ en `Villa Real de La Carlota´, en honor al rey Carlos IV de España. Pocas poblaciones de Córdoba tienen esa antiguedad”.