“Este congreso está signado por una característica especial, porque pasaron 15 años desde la realización del último, por la situación del país. La democracia está dejando ya sus huellas en estos pocos más de 20 años de vigencia ininterrumpida, aunque tiene todavía muchos compromisos que cumplir. El Congreso de la Cooperación, que era una deuda que teníamos con nuestros cooperativistas, nuestros hermanos y con la sociedad toda, ha tenido muchísimas jornadas preparatorias, reuniones, comités de trabajo permanentes, realmente creo que el lunes 19 de abril día fijado para la clausura va a ser un desborde de participación, con un documento con contenidos históricos.
En primer término vamos a fijar las pautas para que cada 4 años se reúna este congreso. Además, habrá una comisión permanente de control y seguimiento de las propuestas de emitidas, porque no es cuestión de hacer un documento y que quede en una biblioteca. Y el gran objetivo de este congreso es fijar las pautas y políticas del cooperativismo argentino para que sean parte de las políticas del Estado Nacional, creemos que ha llegado la hora de mostrar a la sociedad toda que el cooperativismo argentino se ha recibido de adulto, hemos soportado todas las crisis que vivió nuestro país, y estamos sólidos y firmes, con propuestas concretas para el desarrollo de Argentina.
Queremos recuperar el manejo de los recursos de las economías regionales, necesitamos administrar nuestros ahorros a través de cajas de crédito, reclamamos la desgravación impositiva para dedicar esos fondos a infraestructura en el interior del interior del país. ¿Por qué no podemos desgravar, por ejemplo, el 25% de nuestros impuestos, destinando ese dinero a la construcción de las infraestructuras que necesitan nuestras regiones? es un hecho de equidad, de crecimiento de las economías regionales que son contenedoras de la emigración y el hacinamiento en las grandes ciudades. Le doy un ejemplo: una docente de mi pueblo, con varios años de antigüedad, está ganando $ 420, y en el pueblo vecino, por donde pasa el gasoducto, ganan lo mismo, pero con una diferencia: ella al tener el gasoducto, puede calefaccionar su casa con $ 40, en mi pueblo, a la docente le cuesta el sueldo y algo más calefaccionar su casa, esto demuestra la falta de infraestructura, y las cooperativas podemos hacerlas a través de una desgravación impositiva, a lo que se debe llamar como un principio de equidad, es un tratamiento justo, es evitar la discriminación”.