“La audiodescripción de una película consiste en describir lo que se cuenta en imágenes. Es un sistema utilizado para lograr que personas con discapacidad visual puedan interpretar lo que no pueden ver. Por ejemplo, una escena donde van personas caminando y sólo se escucha música”, explica Alejandro Guillermero que tiene visión reducida e integra Cine Inclusivo desde Rosario, grupo que ya aplicó esa técnica a 14 largometrajes y actualmente tiene dos en proceso.
Antes de realizar este trabajo, se pide autorización a los directores o productoras de cada película, con el compromiso de exhibirlas de manera gratuita. Luego, se comienza a trabajar en el análisis sonoro, se redacta el guión y se corrige. “Hacemos hincapié en que las personas con discapacidad sean quienes corrigen los guiones porque a veces con el afán de describir se explica mucho, por ejemplo `arranca el auto´ o `el público aplaude´”, detalla Alejandro.
Finalizada esa etapa, se edita el audio y se lo sincroniza a la imagen. “Nosotros proponemos un cine inclusivo, donde puedan disfrutar personas con discapacidad visual y personas que no. Por esto las descripciones se realizan sobre las imágenes aprovechando los espacios entre los diálogos, con un sistema planteado para que no resulte `pesada´ para las personas videntes”, especifica el integrante de Cine Inclusivo.
También con subtítulos
Fernanda Cardozo integra Cine A/D Producciones. Hace 5 años que este grupo de productores cordobeses investiga sobre audiodescripción y 2 sobre subtitulado, para incluir a personas sordas. Ya trabajaron con cortos, spots, mediometrajes y actualmente están finalizando su segundo largometraje. “Tratamos de promover este cine y participar de charlas, jornadas y eventos. El año pasado llevamos a cabo un ciclo de proyecciones mensuales en distintos espacios o centros culturales de Córdoba, que cerró el 3 de diciembre, día de las personas con discapacidad, con la proyección de `Relatos Salvajes´ subtitulada y con la utilización de auriculares para las personas no videntes, de manera que no afectara al audio original de la película”, comenta Fernanda.
Tanto en CI Rosario como en A/D Producciones, las películas están disponibles para instituciones que quieran proyectarlas. En este sentido, siempre tratan de que esté presente un integrante de la productora, por lo que el único requisito económico es la cobertura de esos gastos.
Con mirada nacional
César Pereyra es cordobés, tiene 26 años y es corrector en A/D producciones. Es no vidente y le gusta el cine. Tal es así que ya vio alrededor de 30 películas tanto argentinas como españolas a través de audiodescripción. “Es una posibilidad que se abre para incluir a personas con discapacidad en el mundo del cine. Es muy lindo poder disfrutar de las películas y también es interesante porque a nivel social podes participar de charlas sobre el tema”.
Sobre su trabajo como corrector, asegura que “Suelo colaborar en las correcciones de los guiones de A/D Producciones porque me interesa poner mi mirada, una mirada argentina, que es muy diferente a la de España, que tiene otro dialecto, otra forma de describir”.
César hace hincapié en que “Sin audiodescripción, la persona con discapacidad visual que va al cine necesita que alguien le explique lo que está pasando en la película, es muy dependiente de eso”.
Un arduo trabajo
Si hay algo para destacar es que este gran desafío de adaptar películas lleva incontables horas y en general no cuenta con financiación, por lo que se realiza generalmente `a pulmón´. Asimismo, de a poco estos proyectos audiovisuales se van proyectando en distintos lugares del país y a paso lento pero sostenido, comienzan a organizarse ciclos de cine inclusivo. También van sumándose productoras y grupos interesados en el tema que comienzan a adaptar publicidades, cortos y largometrajes. En este sentido Fernanda y Alejandro suelen contactarse con colegas de Entre Ríos, Mendoza y Buenos Aires.
Por otro lado, todos los entrevistados recalcan la importancia de promover la participación de las personas con discapacidad y fomentar la accesibilidad a los eventos culturales, en este caso el cine. También coinciden en la importancia de la difusión. “Nos gustaría que todo esto se conozca más. Es difícil que una persona que nació ciega quiera ver una película cuando nunca lo hizo, nunca tuvo el hábito. Para mí es importantísimo que una persona con discapacidad visual pueda salir de su casa y disfrutar del cine o de otros eventos. Nosotros hacemos esto porque nos gusta, creemos en este proyecto y nos encanta ver a las personas disfrutando de la experiencia. Es algo que no tiene precio”, finaliza Alejandro.
Integrar a través de la cooperativa
La Cooperativa Integral de Villa Carlos Paz (Coopi), junto a Bastones Integrados (espacio de encuentro para personas con discapacidad visual), organizan periódicamente en su sede encuentros para disfrutar de cine inclusivo.
Datos de contacto:
Cine Inclusivo desde Rosario
Cine A/D Producciones
