Entusiasmo, permanentes ganas de hacer y mucho trabajo. Eso es lo que transmite la escuela de aspirantes a bomberos voluntarios `Sueño Naranja´ de la localidad de Luque, al centro-este de la provincia de Córdoba. Y no es para menos, ya que forma a quienes realizarán una labor tan noble y admirable como es la que llevan adelante los bomberos voluntarios. “No tengo alma de docente, tengo alma de bombero”, dice Mariela Vivas, profesora de educación física que sábado a sábado está a cargo de las actividades.
De esta propuesta participan alrededor de 16 chicos cuyas edades van desde los 9 a 17 años y que permanentemente están en movimiento con distintas iniciativas. Una de ellas se denominó #UnMesDePrevenciónYCuidados y se realizó durante septiembre. “Se trató de una campaña integral ya que la idea fue dejar un mensaje diario sobre diferentes temas como educación vial, cuidado del medio ambiente o respeto a la vida, entre otros”, detalló Mariela.
En esta oportunidad jugaron un rol importante las nuevas tecnologías, ya que se trató de fotografías digitales que fueron intervenidas con los mensajes y difundidas a través de las redes sociales. “La idea fue hacer una campaña con mensajes positivos. Sin imponer, sólo dando el ejemplo. Tenemos un facebook de la escuela de aspirantes a bomberos que es un proyecto educativo institucional y en ese espacio publicamos 30 fotos, una por cada día del mes de septiembre”, explicó Mariela.
Los chicos tuvieron una activa participación en la elección del mensaje. “Cada aspirante elegía el mensaje y protagonizaba la foto. Los bomberos le ayudamos a buscar la mejor forma de transmitirlo. Lo interesante fue que para cada uno de los chicos no era solo la elección de un mensaje sino un compromiso y práctica en la vida cotidiana”.
La campaña tuvo una gran repercusión en la comunidad. “Los chicos nos cuentan que muchos compañeros y profesores los han felicitado. Docentes del pueblo y de la zona rural, nos comentaron que utilizaron el material en el aula como disparador para charlar sobre estos temas. Por otro lado se trata de un grupo muy lindo, que transmite a sus pares y a los mayores lo que aprende. Por ejemplo, le llaman la atención a sus padres con el uso del cinturón de seguridad”.
Compromiso con el ambiente
Otra de las iniciativas en las que trabaja la escuela es el proyecto para armar eco- ladrillos con el objetivo de reducir el impacto ambiental de los plásticos en la localidad. “Se plegaron escuelas rurales de toda la zona y cada escuela hizo uno o dos ladrillos. El objetivo fue hacer una obra en un lugar público para visibilizar este trabajo. Construimos un cantero en la Plazoleta de los Niños de Luque y vamos a poner un cartel donde se indique como se hace un eco ladrillo, para que la comunidad se pliegue”, detalló la docente y bombero Mariela Vivas.
Durante los últimos meses de este año los integrantes de “Sueño naranja” visitaron diversas escuelas para multiplicar este proyecto. Esto comenzó a dar sus frutos, por ejemplo en la escuela Especial Crecer, donde ya se están construyendo eco-ladrillos para hacer un cantero.
Un detalle interesante es que “los chicos de `Sueño Naranja´ se hicieron el hábito y continúan con nuevos eco ladrillos que donarán a otras instituciones que quieran realizar construcciones ecológicas”, finalizó.
