Neuquén. Durante el año pasado, 6.200 familias radicadas en asentamientos de la capital neuquina fueron incluidas al servicio eléctrico que presta Cooperativa de Agua, Luz y Fuerza (CALF). Así se desprende de la memoria del ejercicio que recientemente aprobó la Asamblea Ordinaria de Delegados de la entidad.
Sin embargo, el presidente del Consejo de la Administración Marcos Silva estimó que por aquellos que aún queda pendiente su regularización la cooperativa pierde estimativamente una suma que varía entre los 4 y 5 millones de pesos. “Se está trabajando en ese sentido porque es uno de los mayores problemas que tenemos. Resolvemos una situación de irregularidad y al poco tiempo aparecen tres nuevas”, se quejó el titular de CALF, al tiempo que dejó en claro que el balance no sufre déficit.
Según explicó, en 2010 el Plan Social de Inclusión al Servicio Eléctrico permitió incorporar a 6.200 familias de ocho sectores de la ciudad que se encontraban enganchados al tendido eléctrico. Todas ellas cuentan hoy con medidor y están abonando el servicio.
De acuerdo al Programa que se implementó durante el transcurso del año pasado, se llevó a cabo la electrificación en Cuenca XV-Z1, Gran Neuquén Sur, Valentina Norte, Villa Ceferino y Toma el Tanque, entre otros.
“A los enganchados se les ha dado oportunidades para que se incorporen al sistema y, particularmente, con los asentamientos se ha trabajado mucho en la inclusión al servicio eléctrico. En estos casos se trabaja con la municipalidad y con la provincia, según de quién sea la titularidad”, sostuvo Silva.
En relación a la pérdida de dinero, el titular de la entidad adelantó que ya se trabaja desde diferentes frentes con el objetivo de regularizar la situación y que “la idea es ir bajando esos niveles en el lapso de un año o dos. Esta pérdida no es culpa nuestra”, expresó.
Balance final. Desde la cooperativa se informó que todavía queda por conocer la cantidad de tomas por revertir su situación de irregularidad. Por lo pronto, Silva aseguró que en el contrato de concesión con la municipalidad establecieron que del sistema tarifario 1 millón ó 1,5 millones de pesos estarán destinados para remediar los temas de asentamientos en tierras municipales. Mientras que con provincia tienen acuerdos parciales.
Agregó que se está barajando la posibilidad de que ambos entes se hagan cargo de cubrir la energía de las tierras que son usurpadas, como se hace desde la Jefatura de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires.
“Este es uno de los mayores problemas porque acá se pierde energía y Comesa te multa por esa pérdida. Por eso, desde CALF se está impulsando el trabajo en conjunto para encontrar una rápida solución”, indicó el titular de la cooperativa de energía, quien subrayó que “en Buenos Aires -donde el municipio se hace cargo de pagar la energía- es distinto, no te multan y se puede programar de cuánto es la pérdida y así evaluar las inversiones”.
